Lo que tantas veces se había pronosticado finalmente pasó, tremenda bronca entre barras del equipo visitante y la local, en este caso entre las porras de Gallos Blancos Futbol Club y Zorros del Atlas, dejó saldo de más de una veintena de aficionados lesionados, algunos muy graves, ahora el futuro del estadio y del mismo equipo pende de la voluntad de los dueños del balón profesional, que en próxima reunión decidirán hasta donde llegan las sanciones, sin descartar la posible desafiliación del conjunto queretano. FOTOS AGENCIA AFP Y EFE